viernes, 14 de febrero de 2014

Las alas de un ángel

Las alas de un ángel vuelan
suavemente por la tierra
y tranquilamente planean
por infinitas nubes y tormentas.

Las alas de un ángel se extienden
sobre el mundo terrenal
donde efímeramente
proyecta halos de luz artificial.

Penumbras alcanzan sus alas,
trasfondos de amor y dolor,
lluvias de tristeza y nostalgia
y soles radiantes de alegría.

El suelo se decrepita
mientras mortales oran et laboran
y las alas del ángel se tiñen de negro
como las lágrimas de sus ojos.

El fuego salpica el mundo,
los demonios se proclaman
y diestros se hacen zurdos
como odiados hoy son los que aman.

Cuanto dolor...
Cuanto amor...
Cuanta pena...
¡Cuanta alegría!

Y al clamor de los vientos
nacen esperanzas
ilusiones y perdón
en forma de sonrisas,

caras bonitas y risas
de esas que contagian
y animan graciosamente
al rebelde corazón.

Las alas de un ángel...
los demonios ostentosos...
el cielo glorioso...
el terrible infierno...

Seres de nuestro misticismo
que nos invaden en la imaginación
con placeres y dolores,
con ilusiones y decepciones.

Cuanto dolor...
Cuanto amor...
Cuanta pena...
¡Cuánta alegría!